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NÂD, COMPRENDIENDO LA MÚSICA DEL NORTE DE LA INDIA
Por Sandeep Bagchee
LA ESTRUCTURA DE LA MELODÍA
La forma del Raga
Incluso sin contar con el uso de las Thats como escalas madre, sabemos que los ragas tienen un determinado conjunto de notas, dispuestas de una manera particular. Esto viene determinado por las reglas que rigen la formación de los ragas. Hay dos reglas principales a este respecto enumeradas por Pandit Bhatkhande. En primer lugar, ningún raga puede formarse con menos de cinco notas. En segundo lugar, cada raga debe tener, además de Sa, al menos una de las dos notas Ma o Pa en ella. Además, un raga no puede tomar las formas shuddha y vikrit de una nota en el aroha o el avaroha, aunque puede tomar una forma en el ascenso y la otra en el descenso. En otras palabras, no puede tomar las dos formas, el bemol y el sostenido de la misma nota, como notas consecutivas.
Con la ayuda de estas reglas, podemos ver ahora cómo se puede formar un raga a partir de las notas de la escala musical. Aunque también hay otras condiciones que deben cumplirse a este respecto, las consideraremos cuando surja la necesidad.
Considerando la escala ascendente y descendente con siete notas, si reducimos una o dos notas cada vez de cada una de estas escalas, obtendremos un raga diferente, siempre que nos aseguremos de que una de las notas Ma o Pa estén invariablemente allí y que el número total de notas en el arreglo no sea inferior a cinco. De hecho, basándose en estas reglas, es posible calcular el número total de arreglos de notas que se pueden hacer.
Sin embargo, todos estos arreglos no pueden considerarse ragas, ya que los textos clásicos definen un raga como una combinación específica de notas que se ornamenta con el swara o el varna y que atrae a la mente del oyente. Al aplicar este importante criterio estético, el número real de ragas es limitado. Como dice Ranade:
"La escala elegida no alcanza, sin embargo, el estatus de Raga, a menos que obedezca además a las siguientes condiciones:
1. Debe poseer necesariamente potencialidades estéticas.
2. Debe tomar siempre Sa, la fundamental.
3. Debe emplear toda la gama de una octava y, por tanto, debe abarcar los dos tetracordios.
4. No debe omitir simultáneamente Ma y Pa, lo que significa que siempre debe incluir al menos uno de ellos, si no ambos.
5. No debe tomar consecutivamente los bemoles y los sostenidos de una misma nota”.
Además, muestra cómo estas condiciones surgen lógicamente del principio de tonalidad. Sin embargo, para explicar las características del raga, consideraremos sólo una o dos cuestiones importantes. La primera es la de la estética. En este contexto, Ranade afirma:
"...las potencialidades estéticas necesarias para un raga, según la primera condición, se realizan dando prominencia a una nota particular con preferencia a otras. Esta preferencia pone a esa nota en contraste directo con la armonía tónica del bordón y, por lo tanto, mantiene con audacia el carácter consonante o disonante particular de esa nota, impartiendo así un sello estético distintivo o ethos al raga. La nota que recibe tal prominencia se llama vadi”.
Así, en la perspectiva adoptada por Ranade, una sola nota, el vadi, más que la escala, parece determinar principalmente el carácter estético del raga y, por tanto, también su contorno. Aunque esto puede explicar el papel que desempeña esta nota, cuestión que consideraremos en breve, no se puede aceptar que sea el único factor, o incluso el principal, para determinar el carácter del raga. De hecho, a veces no hay consenso en cuanto a la nota que debe considerarse como el vadi de un raga.
Desde nuestro punto de vista, el aspecto más importante de un raga es su movimiento melódico general y es sólo éste el que puede proporcionar una visión de la atmósfera del raga. Así, son las escalas (aroha y avaroha) que forman el raga, las frases características en el caso de algunos ragas, así como algunos otros rasgos distintivos que se discutirán más adelante, los que ayudan a proporcionar un sello identificable al raga.
El aroha y el avaroha se clasifican como audav (pentatónico), shadav (hexatónico) o sampurna (heptatónico) dependiendo de si cinco, seis o siete notas forman el aroha o el avaroha. Por lo tanto, los ragas pueden clasificarse como audav-audav, shadav-shadav, sampurna-sampurna, así como audav-shadav, shadav-audav, sampurna-shadav, audav-sampuran, etc., dependiendo del número de notas del aroha y del avaroha. Estas clases de ragas se denominan jati.
El aroha y el avaroha pueden diferenciarse además como rectos o vakra (retorcidos). Si las notas se cantan o se tocan en orden serial, se llama aroha o avaroha recto. Sin embargo, cuando se cantan las notas en orden ascendente, si bajamos la escala antes de volver a ascender, esto se conoce como vakra aroha. Del mismo modo, también puede haber un vakra avaroha. Por lo tanto, el orden en que se cantan las notas es de gran importancia, ya que este aspecto determina principalmente la forma melódica y proporciona la base más importante para diferenciar entre ragas que emplean las mismas notas. Por supuesto, a pesar del importante papel que desempeñan estas escalas, la forma melódica del raga puede no surgir sólo de esta única característica y, por lo tanto, no basta con especificar el aroha-avaroha. Hay otros factores importantes que proporcionan a cada raga su forma única.